martes, 14 de junio de 2011

Vidas Paralelas

Sé que no es yo. Y sin embargo, hemos nacido el mismo día, hemos vivido paralelamente miles de sucesos dignos de recordar una noche en la puerta del bar que está cerrando, aunque siempre sin cruzarse. Casualmente las dos teníamos rosas amarillas en el jardín y una luna colgando de la pared. Más tarde me enteraré de que un día de lluvia cambió su vida y que siempre la han considerado diferente porque no se ajusta a la realidad. Hoy sé que en algún momento hemos decidido que a partir de ayer sólo importa el yo, después de aventuras paralelas tras correr cientos de kilómetros en busca de nada. Tal vez nos hayamos encontrado ya en las nubes o en la página de algún libro viejo.
Y me pregunto si  también odiará las montañas rusas de sensaciones que se mueven entre polos opuestos, sin medias tintas; si escuchará música a medias entre el punk, el rock y lo surrealista para tapar el vacío; si también abrirá la ventana para no olvidar que la realidad no está tan lejos.

lunes, 6 de junio de 2011

Paraísos perdidos

Nunca hemos sido capaces de apreciar realmente la gran diferencia que existe entre el verde y el gris. Diferencias abismales de esperanza o placer y la elegancia de lo monótono. Nunca valoramos de verdad la magia de conocer (o tal vez re-conocer) un pequeño detalle nuevo ni el encanto de lo que se escapa al control humano. Nunca estimamos lo suficiente los momentos de meter los pies en el agua fría, mojarnos con la lluvia ni el calor del sol. Como tampoco todos esos momentos que pasamos por alto y que se olvidan como si nunca los hubiésemos vivido porque son tan naturales y sencillos que no encajan en una agenda marrón.
¿Podremos algún día darnos cuenta de lo que significa simplemente comer una manzana? Porque Eva nunca fue en realidad la creadora de un mundo de asfalto.

...Te prometo, amor mío, la manzana.
C. Oliver

miércoles, 1 de junio de 2011

Balances de mayo

Son días de cambio, de revolución, de escribir la historia. De no perder la fe en la humanidad, o en la sociedad.
Tiempos de mayo. De un mayo revuelto, entre la insatisfacción pública, la protesta pacífica y el darse cuenta de que a pesar de todo la vida no se detiene.
Tiempo de flores, de asambleas, de poesía. Tiempo de desesperación, de conseguir un futuro.
Son días de calor, de tormenta, de decisiones.
Un mayo en que he levantado las manos en silencio, he gritado, he soñado. He perdido.
Un mes de lucha, de reír hasta llorar, de pensar en que no hay otro lugar, de ya no jugar a ser mayor, sino de intentar serlo. Un mes de esperanza, melancolía, primavera, de buscar un hueco.
Tiempos de series, de personajes raros, de caras interesantes, de enamoramientos efímeros, de recuperar momentos perdidos, de ajetreo, de deseos insatisfechos.
Son días de intentar un cambio.

sábado, 21 de mayo de 2011

Revolución

Porque al fin hemos demostrado que la unión hace la fuerza, que queremos un cambio, que es mentira que seamos indiferentes a todo lo que pase, y por miles de cosas más.

viernes, 29 de abril de 2011

Retorno (con Eugenio Montale)

Sólo queda un pequeño vaso de helado, un libro, un papel ya medio roto en la cartera, un mapa. La foto de mis pies, el nombre de una plaza, las ventanas intactas. Las palabras escritas en una libreta negra, las ganas de más. Yo.
Y la página 255:

[La speranza di pure rivederti]
La speranza di pure rivederti
m'abbandonava;

e mi chiesi se questo che mi chiude
ogni senso di te, schermo d'immagini,
ha i segni della morte o dal passato
è in esso, ma distorno e fatto labile,
un tuo barbaglio

Eugenio Montale

miércoles, 13 de abril de 2011

Sibyl Vane

Resulta paradógico que El retrato de Dorian Gray recordase a Julieta ayer. Precisamente ayer, cuando Italia ha aparecido de nuevo. Tal vez la casualidad haya querido hacerme ver que el papel de Julieta se ha acabado. O ha trascendido más bien. Ayer empecé a entender que era Sibyl Vane, o quizás empecé a entender que ya lo era antes. Pero sin suicidios finales. Que todos son actores. Hedonistas. Son Dorian Gray, ya después de una fugaz juventud impoluta. Y yo una decena de heroínas trágicas aunadas en Sibyl Vane. Fingidas. Sin conexión con la realidad más que mediante literatura y teatro.
Justo hasta el momento en que deje de asumir como propio un papel que no se corresponde con la verdadera historia. O hasta que el hedonismo propagado por lord Henry deje de hacer efecto.

lunes, 4 de abril de 2011

Perseo

Caminaba calle arriba a las mil y una de la madrugada de un día cualquiera cuando se encontró a Andrómeda sentada en un portal, aún compuesta por el brillo de las pocas estrellas que le quedaban. Pero en su ojo izquierdo Alpheratz comenzaba a extinguirse lentamente, no sabía si por la lluvia o el olvido de su propia existencia. Se paró enfrente, sin decir nada, pensando en las cien mil millones de veces que la había visto tan lejos, que había pensado que sólo eran brillantes luces incorpóreas. Se acordó entonces de una historia interminable en donde lo que cae en el olvido o no se considera real, desaparece. Era por todas aquellas luces artificiales que intentaban hacerle sombra, porque ya nadie recordaba que en otra vida había sido hija de Cefeo y Casiopea, porque si algo no se ve parece que no existe. Por eso se estaba apagando en aquel portal oscuro, sin hacer apenas ruído, imperceptible para quien no sabe ver. Sin pensárselo dos veces, decidió liberarla de los monstruos que la estaban consumiendo, cegando las farolas que había alrededor como si tuviese la cabeza de Medusa entre las manos para matar a decenas de Cetus. El silencio continuaba, pero la luz cada vez era mayor.

jueves, 31 de marzo de 2011

Post mutationem

La vi aquella tarde, apoyada en la barandilla, agarrándose los brazos con fuerza, mientras el viento le movía el pelo y cerraba los ojos. Pude notar cómo intentaba desprenderse de versos ya olvidados cantados por un Catulo que en realidad era un no-me-importa-quién: "Viuamus, mea Lesbia, atque amemus".  Sonreía por no tener que recordar más susurros, ni temer más noes, ni imaginar confesiones inventadas para la ocasión. Creo que me fijé en ella porque en ese momento las dos pensábamos que cuando los sueños se acercan pierden su brillo dorado y se convierten en desencanto. Sabía que habría más, más pasados ideados a medida y el mismo futuro por inventar, otras canciones y poemas, o incluso los mismos, pero ya con un significado completamente diferente.
Por eso, después de un cambio sustancial, sólo se repite: Viuo, ego, Lesbia.

martes, 15 de marzo de 2011

Insomnio

La tónica habitual de sus últimos 46 días. Pero esta vez sin poder distraerlo con fantasías absurdas, con sonrisas de plástico, ni con los restos de la cena fría en la cocina. Sabía que acabaría volviéndose loca, aún sin haber cometido ningún crimen del que sentirse culpable, aunque la sangre caía a chorros por la puerta del congelador. Y, a pesar de todo, la última palabra de cada verso seguía martilleando su cabeza, porque no estaban escritas para nadie más en ese preciso momento. Así que, conciencia limpia en mano y corazón guardado bajo llave en un cajón, se pone los guantes que ha usado tantas veces en tan pocos meses que ya ha perdido la cuenta para dar el primer golpe e intentar dormir al fin con la seguridad de que ahora sí era culpable de algo más que de callar y dejar que todo pase.
...Maldita nieve de este largo enero,
nos cubre el hielo de un silencio aterrador,
mejor lo rompo yo...
Ya empezó el segundo asalto...

jueves, 10 de marzo de 2011

Tic - Tac

Tic...tac, tic...tac, tic...
Noto cómo se desvanece, o cómo no llega.
...tac.
Un nudo en el estómago que se junta con temblores en las piernas, un "sé que puedo" pero no sé si quiero, y la indecisión (¿pero no era incertidumbre?), la nada y el todo. Tic...tac. Doscientas mil palabras por decir y nada de lo que hablar, porque sigo sintiendo como pasan los segundos sin nadá más que hacer. Y el tiempo pasa, y pesa, cada vez más, y el reloj no se calla y no permite ni un mínimo descanso para no tener que seguir dudando de si sólo existe un ahora o es ya un pasado.
No me gusta esperar. Tic...
Pero tampoco puedo pararlo. Tac.